sábado. 20.04.2024

La Diada de Mallorca, ese día que nadie celebra y que ahora, además, se podría trasladar de fecha en el calendario, ha vivido esta tarde-noche su acto institucional, alejado como es costumbre del común de los mortales, y convertido en un evento que poco o nada atrae a los mallorquines, la mayoría de los cuales no sabe, probablemente, ni qué demonios se celebra el 12 de septiembre.

Xeremiers y 'gegants' han tratado de animar la jornada por las calles de Palma, y ya desde las ocho de la tarde el Teatre Principal de Palma ha acogido un acto en el que se han concedido los galardones entregados por el Consell de Mallorca, nombrando a Monserrat Casa i Ametller hija adoptiva de Mallorca.

También ha habido reconocimiento para Gabriel Alomar i Villalonga, nombrado hijo predilecto de la isla, y para Guillem d'Efak, que ha recibido la Medalla de Honor Gratitud del Consell de Mallorca en su categoría de oro a título póstumo. El mismo mérito se le ha concedido a la institución Antoni M.Alcover y a la Escola de Música i Danses.

La Escola de Música i Danses ha actuado también durante el acto, encabezado por la presidenta del Govern Balear, Francina Armengol.

La 'Diada fantasma' culmina su acto central