jueves. 28.03.2024

El portavoz del Govern, Marc Pons, ha anunciado hoy que el ejecutivo va a interponer un recurso contencioso administrativo ante el Tribunal Supremo contra el Real Decreto que regula las características generales de las pruebas de evaluación final de sexto de Primaria que exige la Ley Orgánica de Mejora de la Calidad Educativa (Lomce).

Esta es una de las peticiones que la Federación de Enseñanza de Comisiones Obreras (CCOO) en Baleares ha solicitado a la Conselleria de Educación y Universidad. El sindicato considera que los criterios de reválida son "discriminatorios y segregadoros entre alumnos y entre los centros".

Baleares se suma así a la denuncia que han hecho ya otras Comunidades. Marc Pons ha criticado la "falta de consenso" en la aprobación de este Real Decreto que impone a las comunidades autónomas la obligación de diseñar, aplicar y corregir unos exámenes, no evaluaciones, al alumnado de sexto de Educación Primaria (12 años). No se trata de verdaderas evaluaciones puesto que se reducen a una valoración puntual y descontextualizada del progreso del alumno.

La Conselleria de Educación denuncia que las pruebas solo se centran en tres de las siete competencias que se tienen que desarrollar en la Educación Primaria y que se impone una evaluación externa por parte de maestros de otros centros, lo que, según el ejecutivo, "supone un gasto elevado, para el que las comunidades autónomas no tienen medios ni condiciones, dado que no se prevén de manera clara en el Real Decreto".

El Govern considera que "el Ministerio quiere elaborar rankings de todos los centros docentes españoles con el resultado de estas prueba" sin tener en cuenta "las particularidades del entorno socioeconómico de la comunidad educativa de cada centro".

El Govern denunciará ante el Tribunal Supremo las reválidas de 6º de la LOMCE