El consistorio considera que la facturación no refleja los cambios efectuados en materia de producción y recogida de desechos urbanos y en suelo rústico
El Ayuntamiento de Lloseta ha encargado la realización de un estudio para evaluar la viabilidad del servicio de recogida de residuos, actualmente a cargo de la empresa Melchor Mascaró, como contratista de este servicio para la Mancomunitat de Es Raiguer, y en la que se incluye al municipio de Lloseta.
Actualmente, el municipio cuenta con un sistema de recogida ‘puerta a puerta’ en vez del sistema ‘masivo’ anterior, dentro del núcleo urbano y también ha desechado los contenedores existentes en puntos concretos situados en zonas rústicas para que los residentes de foravilautilicen tan sólo el punto verde habilitado.
Unas medidas destinadas a fomentar el reciclaje, la separación en origen y para abaratar costes. De hecho, el ayuntamiento no descarta ampliar el servicio ‘puerta a puerta’ a las zonas rústicas del municipio.
Sin embargo, según el alcalde de Lloseta, Tolo Moyà, “los datos que se transmiten desde la Mancomunitat, y la facturación asociada a los mismos, no corresponden a la generación y recogida de los residuos, siendo totalmente desproporcionados en relación al número de habitantes y a las fracciones de recogida selectiva efectuadas”.
“Estamos especialmente preocupados por este hecho, puesto que todos los esfuerzos realizados no se ven reflejados en los resultados económicos, que a día de hoy, son mucho peores de lo esperado”, explica el alcalde.
Por tanto, con la intención de “averiguar” si las percepciones se ajustan a la realidad, el Ayuntamiento de Lloseta ha encargado este estudio que asimismo, estipulará las alternativas de futuro en materia de gestión y recogida de residuos, además del parque verde municipal.
Tolo Moyà asegura que el estudio tomará como punto de partida la situación actual, analizará toda la documentación aportada por la Mancomunitat y por el propio municipio y, en función de los resultados y de las valoraciones económicas estimadas “se decidirá un nuevo modelo de gestión, ya sea mancomunado o municipalizado”, concluye el alcalde.
El contrato con Melchor Mascaró finaliza el próximo mes de mayo, estando actualmente en proceso de redacción los nuevos pliegos de condiciones para una futura licitación.