viernes. 29.03.2024

El Obispado de Mallorca ha manifestado este lunes su "repulsa" ante los "comportamientos impropios de un sacerdote" tras la confesión del párroco de Can Picafort, Pere Barceló Rigo, de haber de abusado sexualmente y de forma reiterada de una monaguilla que tenía diez años.

Además, ha manifestado su respeto a las decisiones del organismos judiciales ordinarios y ha reiterado su proximidad a las víctimas de estos abusos.

Desde el primer momento, han asegurado, el Obispado ha adherido a la doctrina de tolerancia cero ante los abusos a menores, impulsada por el Papa Benedicto XVI y continuada por Francisco.

En cuanto al procedimiento canónico, han recordado que el proceso continúa en fase de apelación en segunda instancia.

El párroco ha confesado este lunes los hechos, que ocurrieron entre 1997 y 1998 y ha asegurado estar "totalmente arrepentido".

Durante el juicio que ha arrancado en la Audiencia Provincial de Baleares por estos hechos, el acusado ha manifestado que "uno debe ser algo mejor" y ha asegurado que "nunca he tenido rabia de ningún tipo".

El Obispado siente 'repulsa' por el párroco de Can Picafort