La guerra de Emaya contra la suciedad es incesante, a pesar de lo que algunos puedan pensar. Tanto es así que, las denuncias por ensuciar Palma se dispararon un 143% el pasado año. O, lo que es lo mismo, pasaron de 836 en 2015 a 2035 en 2016.
Así de esas 2035 denuncias, más de la mitad se efectuaron por abandonar residuos en la calle, fuera de los contenedores o por no depositarlos en el horario habitual. Le siguen las denuncias relacionadas con los animales de compañía. Es decir, abandonar los excrementos, llevar los animales sin atar, entre otras. Además de, claro está todo lo relacionado con la recogida de trastos.
Asimismo, aunque en menor medida, se han interpuesto denuncias por el abandono de sacos de material de construcción o mal uso de los contenedores de obras.
EL 54% DE LAS DENUNCIAS HAN SIDO A PARTICULARES
Respecto a quienes ha interpuesto EMAYA las denuncias, el 54% ha sido a particulares. Frente a un 46% que han sido interpuestas a empresas.
Denuncias que, al final, han supuesto unos ingresos totales de 24.894 euros. Y eso que, de momento, solo se han cerrado 260 de los 2035 expedientes abiertos.
