El diputado del PDeCAT Francesc Homs está siendo juzgado por el Supremo, debido a su condición de aforado. Y, lo está siendo por presunta prevaricación y desobediencia al celebrarse la consulta del 9N.
El exconseller de Presidencia de la Generalitat ha llegado sobre las 9:40 al Supremo acompañado por centenares de personas. Muchos de ellos llevaban carteles con consignas en inglés, como 'Love democracy', 'Votar es democracia', 'Somos una nación, seremos un Estado' y urnas de cartón con la leyenda 'I want to be free'.Además, coreaban que "habrá independencia".
Asimismo, Homs también ha recibido el calor de sus compañeros de partido, entre ellos Artur Mas; la portavoz del Govern, Neus Munté; el portavoz parlamentario de Junts pel Sí, Jordi Turull y otros como el diputado de ERC Gabriel Rufián.
Sin embargo, la comitiva también ha estado acompañada por personas con banderas españolas que les proferían gritos antindependentistas.
HOMS: "LO QUE HACÍAMOS ERA UN PROCESO PARTICIPATIVO"
Una vez ya dentro de la sala, Homs ha reconocido que la Generalitat se dio por notificada de la decisión del Tribunal Constitucional (TC) de suspender la consulta el 4 de noviembre de 2014, cinco días antes de la celebración de la misma.
Pero, "no se podía suspender porque no se puede suspender aquello que no se hace", ha apuntado el exconseller. Y, ha añadido, "lo que hacíamos era un proceso participativo, con voluntarios y esas cosas, porque estaba en juego el ejercicio de derechos fundamentales".
Así ha respondido a las preguntas del fiscal superior Jaime Moreno, con quien ha tenido un pequeños rifirrafe. Lo que ha ocurrido es que Homs se ha quejado de las interrupciones en su turno de palabra. Algo a lo que, el presidente del Tribunal, le ha espetado: "esta no es su casa, es el Tribunal Supremo".
