Más allá de los tradicionales gestos conciliadores de estas fiestas, la auténtica mise en scène de socialistas y ecosoberanistas durante estos días han sido los mensajes que ambas formaciones han lanzado con el propósito de convencer a quienes tienen en su mano la potestad para prorrogarles 4 años más su estancia en el Consolat de la Mar.
Una puesta en escena en la que Francina Armengol se ha apropiado con buen tino de uno de los mensajes que, utilizándolo estratégicamente, puede quitarle el mal sabor de boca que las diferentes crisis de los ecosoberanistas le han dejado durante lo que llevamos de legislatura.
"Somos el partido coherente de la izquierda y damos una imagen de tranquilidad", decía una afónica Armengol en su terreno (en la sede del PSIB de la calle Miracle) durante la copa de Navidad que ofreció a los periodistas. La baronesa socialista abre su abanico segura de que puede rentabilizar el movido devenir de MÉS y el decalaje de Podem.
¿Y que han dicho los de MÉS estos días de balance? Se han arrogado el cierre del peaje del túnel de Sóller y que han conseguido celebrar la Diada de Mallorca el 31 de diciembre. La parte social, la que define más al ala de Iniciativa d'Esquerres, ha quedado más diluida. Vamos a ver si, tras la marcha de Barceló, unos y otros consiguen colocar de nuevo todas las piezas en la coalición donde los antiguos "pesemeros" siguen teniendo un importante peso.
