jueves. 28.03.2024

José Enrique Abuín Gey, conocido como Quique 'el Chicle', confesó a la Guardia Civil la madrugada del 31 de diciembre que había arrojado a Diana Quer a un pozo de una fábrica de Asados (Rianxo) que llevaba cinco años abandonada y que, desde entonces, era un punto habitual para esconder alijos del trapicheo de droga.

Las pruebas de ADN que se realizarán en el Instituto de Medicina Legal de Galicia (IMELGA) determinarán si 'el Chicle', como creen los investigadores, actuó solo para secuestrar a Diana Quer, maniatarla y arrojarla al pozo de esta nave usada habitualmente como tapadera para el trapicheo de drogas.

En el pasado el inmueble fue una fábrica de gaseosas y luego se usó para la venta de muebles. También era un sitio frecuentado como juego por los niños y adolescentes de la zona. Ha sido aquí donde agentes de los Grupos Especiales de Actividades Subacuáticas (GEAS) localizaron restos humanos en el pozo de la nave.

La investigación, pendiente de la autopsia a Diana Quer y saber si 'El Chicle' la violó