jueves. 28.03.2024

El líder del Partido Socialdemócrata alemán (SPD), Martin Schulz, ha pedido "responsabilidad" a los miembros de la formación para que apoyen el preacuerdo alcanzado con los conservadores liderados por la canciller, Angela Merkel, para iniciar las conversaciones destinadas a conformar una coalición de gobierno.

En un mensaje de correo electrónica, al que ha tenido acceso la agencia de noticias DPA, Schulz ha destacado la importancia de la decisión que se tomará el domingo en el congreso extraordinario que celebrará el partido en Bonn y ha señalado "el enorme significado" que tiene "para el futuro en Alemania (...), en toda Europa y para el SPD".

"Yo mismo estoy convencido de que merece la pena negociar una coalición con la Unión Cristianodemócrata (CDU) y la Unión Social Cristiana (CSU)", ha asegurado Schulz. El expresidente del Parlamento europeo ha recordado que el SPD ha logrado mucho en el preacuerdo alcanzado con los conservadores en ámbitos como el relacionado con los padres e hijos, los trabajadores y la vida en la ciudad y en el campo.

En su opinión, el electorado tiene derecho a una vida mejor. "Esto sólo lo podemos lograr si aceptamos nuestra responsabilidad común", ha recalcado. Se trata de hacer el país más moderno y de lograr un nuevo comienzo para Europa, ha añadido.

El líder del SPD aspira a convencer a muchos miembros del partido en los próximos días "y naturalmente también en el congreso del partido". "Queremos renovar nuestro país allí donde no es moderno. Queremos recuperar la confianza. Se trata de eso", ha señalado.

El domingo, los cerca de 600 delegados del partido votarán en el congreso extraordinario en Bonn si quieren que su partido abra negociaciones formales con la CDU de la canciller, Angela Merkel, y la CSU para reeditar la gran coalición más de tres meses después de las elecciones generales del 24 de septiembre.

El SPD está dividido y existen aún muchos indecisos. Desde hace días la cúpula se afana por hacer campaña por el "sí", mientras las Juventudes Socialdemócratas luchan por el "no".

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