Cientos de simpatizantes del líder de la oposición rusa Alexei Navalny han iniciado este domingo un día de protestas en todo el país contra las autoridades y para pedir a los votantes que boicoteen las elecciones presidenciales de marzo, que consideran amañadas a favor del actual mandatario, Vladimir Putin.
"Iré a las elecciones cuando haya una opción", decía una pancarta en Vladivostok, una referencia al hecho de que a Navalny se le ha impedido apelar los antecedentes penales que le han impedido comparecer a los comicios. "Putin está devorando el futuro de Rusia", decía otro.
Las protestas se han repetido en Novosibirsk, Kurgan, Omsk, Magadan, Kemerovo y Yakutsk. Los partidarios de Navalny esperan que miles de personas participen en manifestaciones similares en 118 ciudades y pueblos.
"Tu propia vida está en juego", ha dicho Navalny, en un video previo a la protesta. "¿Cuántos años más quieres vivir con estos ladrones, intolerantes y crueles?" En Moscú, donde se espera una protesta más tarde, la Policía ha entrado a la fuerza en la oficina de Navalny para interrogar y registrar a sus ocupantes y ha cerrado un pequeño estudio de televisión que había en la oficina.
La policía ha advertido de antemano que reprimiría con dureza cualquier actividad de protesta ilegal y ha recordado que las autoridades se han negado a autorizar los eventos en Moscú y San Petersburgo, las dos ciudades más grandes del país.
Las encuestas muestran que Navalny tenía pocas posibilidades de vencer a Putin, pero Navalny dice que el sistema está manipulado contra oponentes políticos como él, lo que hace que las encuestas carezcan de sentido.