jueves. 28.03.2024

El Consell de Govern ha ratificado este viernes la distinción Cornelius Atticus en la edición de 2017 a Maria Dolors Besné y John Neville Peter Tunks (a título póstumo) en las categorías femenina y masculina.

Así lo ha anunciado la portavoz del Govern, Pilar Costa, durante la rueda de prensa posterior a la reunión del Ejecutivo, en la que ha recordado que se trata de la máxima distinción que otorga el Govern en el mundo del deporte en reconocimiento a su trayectoria deportiva.

Hasta ahora de los 33 galardonados con el Cornelius Atticus, otorgado desde el 1996, solo tres habían sido para mujeres.

Otra novedad de esta edición es que por primera vez ha habido un Cornelius Atticus galardonado representando al jurado, así como dos representantes de las federaciones, elegidos por la Asamblea Balear del Deporte, en vez de solo uno como hasta ahora.

Desde la anterior edición, los defensores de candidatos no pueden formar parte del jurado para así asegurar la transparencia y objetividad de la votación.

Maria Dolors Besné de Tejada (1944), de 73 años, se inició con 18 años en la práctica del baloncesto en el Sindicadas de Palma. Es la presidenta de la Federación Balear de Voleibol desde el 2016 de la que también ha sido gerente durante siete años. También forma parte de la junta directiva de la Real Federación Española de Voleibol (RFEVB). Fue entrenadora de varios equipos femeninos de máxima categoría en Mallorca, así como directora técnica del CD Juventud de la división de plata femenina.

Actualmente es miembro del comité español técnico de la Real Federación Española de Baloncesto, así como también de la Federación Balear de Baloncesto. A la vez es delegada de la Asociación Española de Entrenadores de Baloncesto y presidenta de esta asociación en ámbito autonómico.

John Neville Peter Tunks (1939) se inició en el mundo del deporte desde pequeño. Además de atletismo también practicaba tenis, modalidades deportivas en las que destacó en edad juvenil. En época universitaria, continuó destacando en especialidades deportivas como los 100 y 400 metros, el salto de altura y el rugby. Desde 1965 empezó a residir en Formentera, y es cuando se puso a trabajar en la promoción del atletismo en la isla. Cabe destacar también su labor como miembro fundador del Club de Tenis Formentera, así como impulsor de la Mini Maratón de Formentera.

A partir del 1981 alternó la residencia entre Ibiza y Formentera. El 1998 recibió por parte del Consell de Ibiza el premio de Mejor Persona Física y el 2002 fue premiado por la promoción del deporte en Formentera. En los últimos doce años de vida compitió en la categoría de veterano en las pruebas de velocidad y longitud donde consiguió hasta 37 medallas en competiciones estatales.

En ámbito europeo y mundial, fue siete veces finalista y bronce en Suecia (2005). La creación del Club Deportivo Espalmador fue uno de sus últimos proyectos. Murió a los 72 años después de haber dedicado más de 30 años a la docencia, la formación deportiva de los jóvenes y la práctica activa del deporte.

Maria Dolors Besné y John Tunks, premios Cornelius Atticus 2017