jueves. 28.03.2024

Los italianos votan este domingo para elegir al sucesor de Paolo Gentiloni en unos comicios de resultado incierto, principalmente por la nueva ley electoral que se aplicará, pero para los que en todo caso el centro-derecha comandado por Silvio Berlusconi parte con ventaja, aunque los antisistema del Movimiento 5 Estrellas (M5S) serán a buen seguro la fuerza más votada.

Para tener opciones de formar gobierno, es necesario reunir al menos el 40 por ciento de los votos, un objetivo distante para las dos grandes coaliciones, la de centro-derecha con Forza Italia al frente, y la de centro-izquierda, con el Partido Democrático llevando la batuta.

Tampoco está al alcance de las manos para el M5S, al que los sondeos sitúan en torno al 28 por ciento aunque los expertos vaticinan que podría conseguir más votos y superar el umbral del 30 por ciento.

Dado el rechazo tradicional de la formación que fundó el cómico Beppe Grillo en 2009 a aliarse con otros partidos, su joven candidato, Luigi di Maio, de 31 años, con casi total seguridad no será el primer ministro más joven de la historia de Italia, arrebatando el título a Matteo Renzi, que busca repetir.

Italia vota con la incógnita de si habrá gobierno o se tendrá que volver a las urnas