jueves. 28.03.2024

La presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, ha trasladado el "inmenso dolor y desgarro" por la muerte del niño de ocho años Gabriel Cruz "cuya sonrisa ha entrado en nuestras casas" y ha subrayado la "dignidad, ternura y gran talla humana" de sus padres Patricia y Ángel, "pidiéndonos a todos serenidad y sosiego".

"No se si voy a ser capaz de expresar lo que siento porque soy presidenta de la Junta pero también soy madre", ha afirmado visiblemente emocionada Díaz, quien ha remarcado que su presencia en la capilla ardiente responde al deseo de "trasladar" el "apoyo y cariño a todos los que en estos momentos están echando de menos al pequeño Gabriel".

La presidenta andaluza ha llegado al Palacio Provincial de Almería pasadas las 17,30 horas acompañada de la alcaldesa de Níjar, Esperanza Pérez, y donde ha sido recibida por el presidente de la Diputación Provincial, Gabriel Amat.

Tras entrar en la capilla ardiente, donde yace el féretro blanco con los restos mortales del pequeño, rodeado de decenas de coronas de flores y flaqueado por peluches y dibujos de 'pescaitos', se ha fundido en un cariñoso y empático abrazo con Patricia Ramírez, con quien ha intercambiado palabras de cariño que han sido acogidas por la madre de Gabriel con tiernas sonrisas.

A continuación, se ha fundido en otro emotivo abrazo con Ángel Cruz, a quien se ha dirigido mientras acariciaba su cara y Patricia lo arropaba entre sus brazos, prodigándole caricias, y ha consolado a la abuela del pequeño.

"La sonrisa de Gabriel y la dignidad de sus padres han entrado en nuestras casas"