Darío Edoardo Viganò, Prefecto de la Secretaría de la Comunicación de Vaticano ha dimitido este miércoles. Así lo ha informado el portavoz de la Oficina de prensa de la Santa Sede, Greg Burke. De momento, hasta un nuevo nombramiento, se hará cargo de la Secretaría monseñor Lucio Adrián Ruiz.
Esta dimisión se produce una semana después de que Viganò leyera una carta que le había enviado Benedicto XVI. Posteriormente, se ha descubierto que el texto original de la misiva del Papa emérito contenía otro párrafo que no fue ni publicado ni leído por Viganò.
El portal del Vaticano 'Vatican News' publicó un comunicado ante la "polémica" suscitada acerca de una presunta manipulación censora, en el que precisa que de la carta, "reservada", se leyó "lo que se consideró oportuno" y relacionado solamente con la presentación. Si bien, precisó que esta opción estuvo motivada por el carácter reservado y no por algún intento de censura. Para disipar toda duda, se decidió hacer pública la carta completa.
Las líneas omitidas contenían una crítica de Ratzinger. Dicha crítica se refería a la decisión de encomendar a Peter Hünermann, la redacción de uno de los volúmenes de dicha colección. Hünerman es un teólogo alemán. Además de uno de los grandes críticos del Papa Juan Pablo II y de su sucesor Benedicto XVI.
"Él participó de manera relevante en el lanzamiento de la 'Kölner Erklärung', que, en relación con la encíclica 'Veritatis splendor', atacó con virulencia la autoridad magisterial del Papa. Específicamente sobre cuestiones de teología moral. También la 'Europäische Theologengesellschaft', que él fundó. "Al principio fue concebida por él como una organización en oposición al magisterio papal", ha subrayada.
En todo caso, añade que, posteriormente, "el sentir eclesial de muchos teólogos impidió esta orientación". Por tanto, se "convirtió esa organización en un normal instrumento de encuentro entre teólogos". Ratzinger concluye diciendo a Viganò: "Estoy seguro de que comprenderá mi negativa y le saludo cordialmente".
