jueves. 28.03.2024

En el pasado más próximo, es decir en los últimos 30 años, después de Félix Pons, que ejerció como presidente del Congreso de los Diputados, el ya exsocialista Joan Mesquida es con toda seguridad el hombre del PSIB balear que ha tenido mayores responsabilidades en el Gobierno central.

A sus ya ex,  exconseller de Hacienda en el Govern balear, exdirector general de Infraestructuras del Ministerio de Defensa, exdirector general de la Policía y la Guardia Civil y exsecretario de Estado de Turismo (que en algunos gobiernos viene a ser como un ministerio), hay que sumar el ex de socialista.

Se ha ido del PSIB-PSOE tras 32 años. Ya no es militante desde el lunes 26 de marzo, que es cuando comunicó su baja al partido.

Pero es un portazo con mensaje porque Más Que Confidencial sabe que Joan Mesquida no tiene intención de desaparecer del mapa:  "Yo no me retiraré nunca de la política", si bien es cierto que a renglón seguido ha añadido "pero hoy por hoy no tengo ningún proyecto de futuro".

De momento en Calvià se queda como director de Turismo. El alcalde Alfonso Rodríguez, del PSIB, le ha dicho que no tiene intención de apartarlo del cargo porque está muy contento con la política turística que está desarrollando, por lo que no tiene ningún motivo para hacer cambios. En el municipio calvianer hay varios funcionarios que desempeñan cargos de responsabilidad y no todos están en el PSOE.

PERO, ¿POR QUÉ SE VA JOAN MESQUIDA?

Hay que remontarse a cuando Bel Oliver, la actual portavoz adjunta en el Parlament, era secretaria de organizacion, y Mesquida dejó la Ejecutiva. Esto fue en julio de 2016, que coincidió además con una espantada de históricos de este órgano del partido en Baleares.

Transcurrido casi 2 años, el hombre que trabajó con Rubalcaba y con José Bono dice a MQC que se marcha porque ,"hace varios años que no entiendo como el partido va abandonando su vocación de fuerza mayoritaria y lo juega todo a pactos con formaciones que desdibujan el mensaje".

Que traducido a román paladino quiere decir que no está de acuerdo con la política de Ferraz en determinados temas, pero lo está todavía menos con la que se hace en la calle Miracle comandada por la nacionalista Francina Armengol.

Y lo cierto es que a Mesquida, ni la propia Armengol ni su gente, auténticos guardias pretorianos, nunca le perdonarán que le disputase a la eterna delfina de Francesc Antich, la secretaría general del partido, a través de su hombre interpuesto. 

Tampoco le perdonan a este funcionario de carrera, la facilidad que tiene para articular un mensaje político. Por eso jamás entendió, según ha sabido este digital de fuentes bien informadas, por qué no contaron con él para ir en las listas al Congreso. Eso es algo que le cuesta entender a día de hoy.

Incluso sus supuestos enemigos dentro del partido admitían a MQC:  "La verdad es que sabe moverse bien en los círculos económicos y turísticos", a propósito de su presencia en un importante foro turístico en Madrid.

Y ¿QUÉ VA A PASAR CON SU FUTURO A CORTO Y MEDIO PLAZO?

Con un enigmático "Ya veremos que nos depara el futuro", Mesquida da un portazo al PSOE y deja la puerta abierta a ¿futuras propuestas?.

La duda está en saber si los cantos de sirena vienen con el color naranja porque el azul del PP daría la razón a quienes en su expartido lo tachaban de moderado y de picotear con la derecha, algo que por cierto utilizaban en contra del PSIB los del arco nacionalista e independentista de la izquierda parlamentaria en la contienda política.

"Yo tengo de momento energía y mantengo intacta mi pasión por la política noble y de servicio público", concluye Joan Mesquida como una especie de mantra.

Un portazo con anuncio: "Yo no me retiraré nunca de la política"