jueves. 28.03.2024

La Asociación para la Revitalización de los Centros Antiguos, ARCA Patrimoni, ha vuelto a insistir en que la nueva normativa de Ocupación de la Vía Pública, recientemente aprobada por el Ajuntament de Palma "no tiene nada de nueva y es tomar el pelo a la ciudadanía"

La entidad ha lamentado su aprobación señalando que presentarán alegaciones puesto que "si comparamos palabra por palabra la normativa vigente y la nueva, las diferencias son mínimas".

En este punto, Arca destaca que "las únicas diferencias sustanciales son la prohibición de toldos (de aqui a 18 meses) y la obligación de recoger los enseres al atardecer. Asimismo,  en la anterior se decía que los metros libres míninos para paso eran de 2 metros y en la nueva  se habla de 2,5 metros (en el Centro y Santa Catalina-es Jonquet)".

En relación con la inclusión del Centro Histórico en la normativa, Arca entiende que no queda claro que su intervención pueda tener un efecto importante lamentando que la nueva normativa no corrige ninguno de los efectos negativos que tenía la anterior y que eran provocados por algunas terrazas y muchas tiendas de souvenirs.

Los problemas que habían provocado las terrazas en relación con la ocupación excesiva en plazas y calles, según ARCA, quedarán prácticamente igual dado el impacto negativo sobre la imagen de la ciudad debido a mamparas, barreras y jardineras. Tampoco se atacan los innecesarios y grandes letreros de sartenes, bebidas y pizzas que continuarán impidiendo la contemplación de la ciudad.

En relación con el impacto estético, esta organización advierte contra los escaparates en fachadas que están invadiendo la ciudad llenando de souvenirs al estilo de Magaluf y la Playa de Palma "ya que la nueva normativa no actúa sobre los mismos quedando igualmente como están en la actualidad".

Por último, Arca subraya que está a favor de las terrazas "pero no al maltrato de la imagen de la ciudad que provocan muchas de ellas y a la excesiva ocupación de espacio público en determinados lugares".

ARCA califica de "tomadura de pelo" la normativa sobre terrazas de Cort