La Dirección Insular de Política Lingüística rinde tributo póstumo a Manel Marí, ganador del premio Mallorca de Poesía 2005. Y, lo hace con la breve reedición de su poesías en el folleto número 24 de los «Poemas en la Sala de Espera». Estos folletos se distribuyeron durante Sant Jordi y se hará llegar a bibliotecas, centros educativos, hospitales y otros lugares que tengan sala de espera.
El poeta ibicenco era, sin duda, una de las voces más profundas y consolidadas de la poesía catalana actual. Su muerte prematura, a principios de este año, supuso un duro golpe para las letras catalanas.
Por eso, para recordarle, el tríptico del Consell sale a la calle con la intención de hacer salivar al público lector. Aunque sea, a penas, con una pequeña muestra de la obra poética del desaparecido escritor.
Entre las obras de Marí destacan Poemes en gris (1999, premio Miquel Àngel Riera. Sa Nostra, El Turó, libro con el que irrumpió en la escena literaria); Clarisse (2000, Universitat Politècnica de València); Poemari de descortesia (2000, Res Publica Ediciones); Patrimoni dels dies (2001, Institut d' Estudis Eivissencs, premio Baladre), y Deshàbitat (2004, Ediciones 3i4, premio de poesía Senyoriu d' Ausiàs March de Beniarjó, 2003).
Todas esas obras y las que no aparecen recogidas le han valido a Marí multitud de reconocimientos. En 2005 su obra No pas jo fue la ganadora en la primera convocatoria de los Premis Mallorca de Poesia. Dos años más tarde, recibió el Premi Ciutat de Palma Joan Alcover con el poemario El tàlem. Y el último reconocimiento en forma de galardón le llegó en 2016, con el Premio Valencia Alfons el Magnànim de poesía, con la obra Tavernàries.
