El 28 de junio de 2003 (ayer jueves se cumplieron quince años) el RCD Mallorca disputó la tercera final de Copa de su historia. El destino brindaba otra oportunidad tras haber caído en la prórroga frente al Atlético de Madrid (0-1) en 1991 y en los penalties ante el FC Barcelona en 1998.
Más de 14.000 aficionados viajaron desde la isla hasta Elche, la ciudad alicantina que acogió el encuentro. Muchos de ellos ya habían estado presentes en las finales citadas anteriormente. Sin embargo, esta era distinta. Los barralets eran los favoritos. Y es que enfrente esperaba el Recreativo de Huelva, un conjunto que disputaba la primera final de su ya centenaria historia siendo equipo de Segunda. Eso sí, y para no desmerecer el hito conseguido, cabe recordar que por el camino los entonces dirigidos por Manzano eliminaron en cuartos al por entonces vigente Campeón de Liga, el Real Madrid (1-1 y 4-0), y en semifinales, al defensor del título, el Deportivo de La Coruña (2-3 y 1-1).
Aquella tarde acabó en fiesta. Los isleños se impusieron con un rotundo 3-0 merced a las dianas de Pandiani y Eto´o, este último por partida doble. De esta manera, el RCD Mallorca conseguí su segundo título importante oficial tras la Supercopa de España alzada en el Camp Nou en 1998.
El manacorí Miquel Àngel Nadal fue el encargado de levantar el trofeo tras recibirlo de las manos del Rey Juan Carlos I. Una escena que presenciaron, entre otros, desde el palco la Ministra de Cultura, Educación y Deporte, Pilar del Castillo; el Presidente de la Generalidad Valenciana, Francisco Camps; y el Ministro de Trabajo, Eduardo Zaplana.
Curiosamente, tres lustros después, Camps declaró como testigo del caso Gurtel. Fue el 7 de marzo de 2018 cuando respondió a la pregunta "¿Quién le envió a Pérez ["El Bigotes"]?" con estas palabras: "El presidente del partido. Eduardo Zaplana".
