viernes. 19.04.2024
Las terrazas prácticamente vacías a la hora del aperitivo y la comida en Punta Ballena (Foto: María Jesús Almendáriz)
Las terrazas prácticamente vacías a la hora del aperitivo y la comida en Punta Ballena (Foto: María Jesús Almendáriz)

En MallorcaConfidencial hemos ido a Calvià, a la zona de Punta Ballena de Magaluf, para hablar con los comerciantes, turistas y empresarios cómo se ha vivido este verano plagado de 'balconing', peleas y redadas policiales varias, que hacían prever que el lleno había sido total y que la ocupación había sido tan buena como las anteriores. Lunes por la mañana del 24 de septiembre con un sol aplastante, las playas desiertas, las calles vacías, las terrazas con todo libre para elegir donde sentarse y los comercios y tiendas de souvenirs sin nadie a quien vender. 

Abordamos a los que ocupan una mesa de una terraza, serios y atendiendo agendas y teléfonos, y preguntamos a quienes después afirman ser proveedores de cerveza y de licores. 

¿Cómo ha ido el verano, ha habido muchos problemas con el balconing y las peleas?

Reticentes en un principio, nos explican que ha sido una de los peores veranos de la zona, que se han cargado el turismo británico, ese turismo que sale de los hoteles y disfruta en las terrazas y que consume, que es lo importante.

"Y encima salen esos de las pancartas echando a los turistas y diciendo que los turistas matan Mallorca, a ver qué tienen que decir ahora los políticos", se queja uno de ellos. "No puede ser que Magaluf esté tan estigmatizada con lo del balconing, con las peleas", añade con cierto enfado porque "entre todos se están cargando el turismo, y aquí todos vivimos de esto". "Lo que ha ocurrido este verano ha pasado toda la vida, lo que pasa es que antes no había teléfonos móviles". "Tu misma eres testigo, me dice el otro interlocutor de los cuatro abordados, las calles están desiertas y aquí no hay nadie. Esto en un día como hoy de calor, de estar en la playa no es  normal". Y añade lo que suena como la ratificación de que la temporada ha ido francamente mal: "En pleno mes de agosto, la mayoría de hoteles, han tenido que tirar precios, llamar a los turoperadores y vender el 'todo incluido' por 35 euros. Con esto, está todo dicho".

Dos turistas se marchan de Punta Ballena tras pasar unos días de vacaciones (Foto: María Jesús Almendáriz) Dos turistas se marchan de Punta Ballena tras pasar unos días de vacaciones (Foto: María Jesús Almendáriz)

Dejamos la terraza y pasamos por una tienda de tatuajes, también vacía, que afirman que nunca hablan con la prensa. Entramos en un estanco de grandes dimensiones y preguntamos a las dependientas.

¿A vosotros cómo os ha ido la temporada?

"Mal, mal. Los británicos no han venido. Todo el mundo se queja que la cosa no marcha. No sé, parece que en año de mundial... ", comenta una de las dependientas con una cara que denota que lo que cuenta es lo que sucede realmente.

La imagen parece que ha sido tomada en invierno, en lugar del mes de septiembre porque parece un lugar fantasma (Foto: María Jesús Almendáriz) La imagen parece que ha sido tomada en invierno, en lugar del mes de septiembre (Foto: María Jesús Almendáriz)

¿Y qué tipo de turistas han venido? 

"Franceces, italianos, argelinos y pakistaníes", explica un tanto sorprendida sobre todo porque estos dos últimos mercados no son habituales por la zona.

Punta Ballena desierta un mes antes de que acabe la temporada alta (Foto: María Jesús Almendáriz) Punta Ballena desierta un mes antes de que acabe la temporada alta (Foto: María Jesús Almendáriz)

Seguimos el recorrido y muy cerca de la zona de playa entramos en una tienda que nos da las claves de qué ha pasado este verano.

Nos comentan que la temporada ha ido muy mal y que los británicos no han venido. ¿Qué ha pasado?

"Ayer estuvimos todo el día y cerramos con 80 euros en la caja", asegura la propietaria que regenta la tienda con su marido, ambos mallorquines. "Ha sido el peor verano que hemos vivido en 28 años, no hay gente, está todo vacío, los de allí al lado ya han dicho que en cuanto acabe el mes cierran, cuando lo normal es cerrar a finales de octubre. Es terrible". Y entonces me señala a un proveedor de snacks mallorquines. "Mira, viene a reponer y no hemos vendido nada. No hay familias, no hay niños, no han consumo".

Los pocos turistas en esta zona de Magaluf confirman que la temporada no ha sido buena (Foto: María Jesús Almendáriz) Los pocos turistas en esta zona de Magaluf confirman que la temporada no ha sido buena (Foto: María Jesús Almendáriz)

¿Quién tiene la culpa, porque ustedes tendrán alguna explicación?

"Claro que sí. Los grandes hoteleros de esta zona, que son dos, se han cargado el turismo subiendo precios. La gente no viene y la que viene no sale de esos hoteles. El otro día una amiga sueca me dijo que por 10 días le habían cobrado 1.700 euros y que otra había pagado por los mismos días 2.200 euros. Con estos precios, los turistas se lo piensan dos veces y prefieren irse a Egipto o Túnez, que ya han vuelto a estar en el mercado competidor". "Y los franceses y los italianos miran mucho el euro", afirma la experta empresaria que para reforzar su argumento cuenta que incluso un sello les parece caro. "Con el todo incluido y con la subida de precios están matando el turismo, pero no aquí, en toda Mallorca", sentencia.

¿Y el Ayuntamiento de Calvià, qué hace, qué dice?

"Mira, pagamos 1.800 euros por la limpieza de calles, una barbaridad. Y tenemos que pagar alquiler, luz... y no llega, y menos con veranos como este, pero bueno del Ayuntamiento no quiero hablar..., mejor no hablar". Los comerciantes no entienden cómo han podido dar licencia a dos supermercados de marca alemana, los Aldi, que han acabado minando aún más la mala racha que atraviesan los pequeños y medianos comerciantes de la zona. "Sí, sí, los turistas entran y nos preguntan qué donde está el Aldi, claro nosotros les indicamos porque ellos no tienen la culpa, la culpa la tiene quien ha dado las licencias".

La marca de supermercados alemana se anuncia camino de Calvià (Foto: María Jesús Almendáriz) La marca de supermercados alemana se anuncia camino de Calvià (Foto: María Jesús Almendáriz)

De una tienda de souvenirs pasamos a una joyería, donde venden todo tipo de artículos, desde gafas, pulseras, anillos, collares, pendientes... una amplia gama, con una marca que destaca sobre todas las demás, mallorquina de toda la vida. Hay suerte, están atendiendo a una clienta.

Estoy hablando con los comerciantes de Punta Ballena, me dicen que a ustedes también les ha ido bastante mal

"Llevo aquí muchos años y nunca había vivido un verano como este. No es que no compren, es que no hay turistas". "Terrible, terrible", repite mientras vuelve a colocar en el stand las gafas que ha enseñado a la clienta que había entrado en la joyería.

¿Y en esta bajada de ventas, de qué porcentaje estamos hablando?

"De un 40%", afirma inmediatamente sin pensárselo dos veces. Es la cifra que ya han computado en este establecimiento tras el balance de cuentas.

 

Dejamos Punta Ballena, pero antes pasamos por la zona más selecta donde han abierto grandes tiendas marcas como 'Mango' y 'Victoria Secret'. Sin embargo lejos de contradecir las diversas opiniones recogidas, hablamos con las dependientas y nos confirman que no entra casi nadie, que el verano ha ido fatal. Y lo extraño de todo es que "seguimos abiertos durante el invierno", comentan con gesto de decir, no sabemos finalmente qué pasará, aunque por otra parte esperan que así sea, pese a las circunstancias, porque ganarán un sueldo, vendan o no vendan.

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