sábado. 20.04.2024
El conseller insular de Hisenda y Turisme del Consell de Mallorca, Cosme Bonet (Foto: Tomeu Massanet)
El conseller insular de Hisenda y Turisme del Consell de Mallorca, Cosme Bonet (Foto: Tomeu Massanet)

Fitur, la Feria Internacional de Turismo, celebra una nueva edición, que para Baleares supone un final de ciclo, cuatro años de legislatura y a las puertas de las elecciones de mayo, por lo que los responsables políticos se presentan a la cita de Madrid con nuevos proyectos que convenzan, sumen y, lo que es más importante, que se puedan implementar para avanzar en la larga carrera de la diversificación por la que tanto trabajan las zonas 'maduras' como Mallorca. 

Una nueva temporada turística a la que acechan, sin embargo, algunos nubarrones que llegan con la recuperación de los mercados competidores tradicionales de la Isla, como son Turquía, Egipto o Túnez. El fantasma de los antiguos competidores vuelve a planear de nuevo en Fitur y en Mallorca se quiere contrarrestar fundamentalmente ofreciendo seguridad y calidad. Mallorca es un destino seguro para poder practicar un sinfín de actividades y disfrutar con calidad de una larga lista de experiencias.

Como dice el conseller insular de Hisenda y Turisme del Consell de Mallorca, el socialista Cosme Bonet, "a Mallorca tiene que ser atractivo venir no por el precio, sino por tener la capacidad de ofrecer experiencias en el deporte, la cultura, gastronomía y la conectividad y cercanía con las principales ciudades europeas".

Unas buenas razones que encajan perfectamente con la nueva y muy atractiva apuesta que el departamento de Bonet lleva a Fitur: el turismo cinematográfico. La Fundació Mallorca Turisme a través de la Mallorca Film Commission, organiza unas jornadas con expertos que lideran casos de éxito de grandes producciones audiovisuales vinculadas con destinos turísticos. 

De esta nueva iniciativa, potenciar Mallorca como plató, pero también como destino turístico de series, de cómo se presenta la temporada, de la marca Mallorca, y de los meses punta en verano que llenan las carreteras de coches y el centro histórico de Palma de miles de turistas, hablamos con el conseller Bonet, convencido de que ni el empresario quiere que nos convirtamos en una Venecia, ni el trabajador tampoco.  

El conseller insular de Hisenda y Turisme del Consell de Mallorca, Cosme Bonet (Foto: María Jesús Almendáriz) El conseller insular de Hisenda y Turisme del Consell de Mallorca, Cosme Bonet (Foto: Tomeu Massanet)

¿Cómo se presenta esta edición de Fitur, la última de la legislatura y a las puertas de las elecciones de mayo?

Hay que reconocer que se presenta con un poco más de incertidumbre. Es cierto que nuestro mercado se ha recuperado y que desde el 2012 hemos tenido temporadas récord, que se han traducido en una recuperación económica buena.

Pero a raíz de que Turquía se recuperó de la situación política complicada que tenía, ya el año pasado algunos hoteles bajaron precios a última hora, aunque no nos olvidemos de que éste no es el único factor a tener en cuenta. Las altas temperaturas, inusuales en el norte de Europa también influyeron. Ojo con el cambio climático, del que en estos casos se habla muy poco, pero lo cierto es que algunas playas británicas estuvieron muy concurridas el verano pasado.

No obstante, y a pesar de todo ello, no se oyen voces de alarma catastrofista. No volveremos a las temporadas de hace 7 años. Por tanto, cierto temor, cierta incertidumbre, pero no catastrofismo. Una cierta desaceleración dispara las alarmas, pero tenemos los mimbres suficientes para mantener nuestra competitividad.

Vender Mallorca como enclave perfecto de localizaciones de películas y series de TV para multiplicar exponencialmente la promoción de la Isla

Sí, es lo que traemos a Fitur. Intentamos potenciar Mallorca como plató, pero también como destino turístico de series. Es una inversión de futuro y es una iniciativa en la que se mezclan dos líneas de trabajo. El sector audiovisual deja una buena inversión cuando rueda y luego estos lugares se convierten en atractivo turístico.

El turismo de cine y de series de TV es un gigante que está subiendo exponencialmente en todo el mundo. Nunca se ha movido tanto dinero en este sector y está claro que Mallorca tiene que estar ahí. La buena conectividad, el alojamiento y nuestros recursos naturales, en pura lógica nos hacen muy atractivos para hacer localizaciones.

Por otro lado es importante destacar que los niveles de visualización de estas películas son espectaculares y los platós de estas series son un peregrinaje constante de los turistas. Y ejemplos de lo que estoy explicando los encontramos en Túnez, donde se rodaron algunas escenas de Star Wars, o la ruta de los escenarios de Harry Potter en Londres y en Irlanda que también tiene su ruta de Juego de Tronos. En España, Andalucía es otro buen ejemplo de escenarios donde se han rodado muchas películas.

Ahora mismo y en el Mediterráneo, Malta y Croacia, son dos de los lugares que están trabajando mucho este sector, que en nuestro caso serviría además para alargar la temporada y, especialmente, para crear un nuevo nicho turístico de futuro.

Mallorca escenario de películas y series en Fitur 2019 (Foto: Mallorca Film Comission) Mallorca escenario de películas y series en Fitur 2019 (Foto: Mallorca Film Comission)

En Mallorca ya ha habido alguna experiencia con repercusión internacional

Así es. En 2015 se rodó la miniserie de la BBC 'El infiltrado' con una importante repercusión tanto en Europa como en Estados Unidos. Y para su filmación utilizaron localizaciones en  Palma, Cala Deià y sa Fortalesa del Port de Pollença. Fue muy premiada con protagonistas como Hugh Laurie, 'Doctor House', y Tom Hiddleston, Loki, en 'Los vengadores de Marvel'.

Un fotograma de la miniserie 'El infiltrado' Un fotograma de la miniserie 'El infiltrado'

¿Y en Fitur cómo se va a materializar todo esto?

Las verdad es que tenemos mucha confianza en esta nueva línea de trabajo, ya que Mallorca puede ser un referente para la industria audiovisual internacional. Consecuentemente, la Fundació Mallorca Turisme del Consell, a través de Mallorca Film Commission hemos organizado una jornadas con expertos que lideran casos de éxito de grandes producciones vinculadas con destinos turísticos.

"La vuelta al mundo en 80 películas y algunas series", es el título de las mesas redondas que se han organizado, y en las que se analizarán los resultados de estrategias ligadas al producto audiovisual en destinos como Irlanda, Estados Unidos o Nueva Zelanda.

Cosme Bonet durante su participación en Fitur de la propuesta de Mallorca como escenario de películas y series (Foto: CIM) Cosme Bonet durante su participación en Fitur de la propuesta de Mallorca como escenario de películas y series (Foto: CIM)

Tras asumir las competencias de promoción turística el pasado mes de abril, ¿qué balance hace?, ¿se ha mejorado la marca Mallorca?, ¿de qué forma?

El primer reto era demostrar que el Consell Insular de Mallorca podía gestionar con garantías la promoción. Y sólo le voy a dar un dato. La Fundació Mallorca Turisme tiene presencia en 15 ferias. En la ITB de Berlín tendremos sólo para nosotros 220 metros cuadrados, será un anexo al estand de Baleares, no estaremos separados, pero el espacio será solo para Mallorca. Por lo tanto, el balance es que somos capaces de gestionar y de dar un paso más en la promoción turística.

El conseller insular de Hisenda y Turisme (2º por la derecha) en la London Design Fair (Foto: Caib) El conseller insular de Hisenda y Turisme (2º por la derecha) en la London Design Fair (Foto: Caib)

En cuanto a la marca, hemos llevado la promoción de Mallorca a más destinos buscando la diversificación de mercados, como el escandinavo, el ruso, norteamericano y hasta el chino. No dejamos, además, de estar presentes en los mercados tradicionales. El sol y la playa está consolidado, pero no nos podemos olvidar de él, porque es nuestra locomotora y no hay que descuidarlo. Eso sí, lo importante es que la marca Mallorca se pueda identificar con otros productos además de sol y playa. Y en ese camino vamos.

Cosme Bonet con la Asociación de empresarios chinos para abordar nuevas estrategias de promoción turística Cosme Bonet con la Asociación de empresarios chinos para abordar nuevas estrategias de promoción turística (Foto: CIM)

El panorama turístico ha cambiado en un año sustancialmente, porque se han recuperado los mercados competidores de Baleares, ¿qué turismo queremos para Mallorca, teniendo en cuenta que esos mercados trabajan con precios a la baja?

No debemos disparar las alarmas. No hay que pensar en que Mallorca va a mantenerse volviendo a competir por precio. No estamos en esa fase. En estos últimos años Mallorca se ha posicionado muy bien para ser un destino de turismo de calidad.

Si bien es cierto que en los países competidores las condiciones de seguridad han mejorado, de momento tienen un largo trecho para llegar a lo que tenemos nosotros en este sentido. Consecuentemente, tiene que ser atractivo venir a Mallorca no por el precio, sino por tener la capacidad de ofrecer experiencias en el deporte, cultura, gastronomía, cercanía y conectividad con las principales ciudades europeas y sobre todo, seguridad.

En Mallorca podemos ir de compras con toda tranquilidad, tenemos una variedad de cocineros que no pueden ofrecer nuestros competidores, podemos salir en bicicleta sin preocuparnos si será o no seguro, tenemos mucha diversidad. En resumen, mientras el sector privado mantenga precios, no saltará la alarma. Mallorca puede seguir apostando por el turismo de calidad, sin tener que recurrir a la competencia de precios.

¿Están preocupados?

En Mallorca podemos decir que tenemos un sector privado consolidado. La oferta y la calidad en restauración y  servicios es una de nuestras mejores bazas. Nuestro gran reto, sector público y privado, es seguir prestando un servicio turístico de primer nivel. Y tengo que decir que hemos coincidido en nuestro objetivo final firmando un buen convenio de hostelería y dando una buena formación.

El convenio colectivo de hostelería es, sin duda, una buena inversión de futuro, porque eso se traduce en que hay interés por tener trabajadores a gusto en su puesto y esto, lógicamente, redunda de forma significativa en que sigamos siendo un destino de calidad. Esto, desde luego, es clave.

En este sentido, ¿tenemos una oferta hotelera a la altura de la demanda y a la altura de lo que se quiere conseguir?

Sí, sí. Las grandes compañías se han puesto las pilas y un ejemplo de ello lo vemos en Magaluf. Es cierto que a los que les puede costar más es al pequeño y al mediano hotelero, pero también están haciendo un esfuerzo.

Tengo que decir, que salvo algunas excepciones muy puntuales, en Mallorca estamos muy mal acostumbrados y hoteles que aquí son de tres estrellas, en otras zonas podían pasar por cuatro estrellas. Esto quiere decir que estamos a la altura si tenemos en cuenta lo que se ha reformado y rehabilitado en zonas como Calvià.

¿Qué mensaje transmite tanto al sector turístico, como a los vecinos de pueblos o de Palma que se sienten agobiados en verano?

Que la masificación o saturación del turismo se gestiona, en el tiempo y en el espacio. ¿Qué es lo que está saturado?, esa es la cuestión. A veces el turismo se concentra en una serie de actividades, por ejemplo en Palma (cruceristas). Además hay que tener en cuenta que el turismo se mueve, quiere conocer cosas, visitar lugares. comer en diferentes restaurantes, no es como el turismo de los años 60 y 70 de sol y playa en el mismo sitio.

Esto es lo que tenemos que gestionar, sobre todo en los meses punta como julio y agosto. ¿Qué tenemos que hacer?, intentar ponernos de acuerdo todos. Está claro que la opinión de los mallorquines es clave para la sostenibilidad del turismo. Pero también hay que tener en cuenta de que no podemos pasar de decir: esta temporada es un desastre porque hay mucha gente, a es un desastre de temporada porque ha venido poca gente.

Yo creo que existe un punto de equilibrio para el modelo turístico de Mallorca y entre todos lo vamos a encontrar. Sí, estoy convencido porque todos estamos en esa línea. Ni el empresario quiere que nos convirtamos en una Venecia, ni el trabajador tampoco. No digo que no haya saturación, pero en lo que hay que incidir es en qué meses debemos actuar, en qué momento. El turismo del siglo XXI se quiere mover y en Mallorca necesitamos más transporte público, necesitamos un tren que llegue a la costa y que se conecte con las zonas turísticas. El transporte ferroviario es fundamental para ser un destino turístico de calidad.

Cosme Bonet con el presidente Sánchez, Armengol y la presidenta de FEHM, Maria Frontera (Foto: FEHM) Cosme Bonet con el presidente Sánchez, Armengol y la presidenta de FEHM, Maria Frontera (Foto: FEHM)

Cosme Bonet: "Intentamos potenciar Mallorca como plató, pero también como destino...