El mallorquín Toni Moya no olvidará la tarde de este sábado. Y es que el nacido en 1998 en Son Servera se ha estrenado hoy como titular con el Atlético de Madrid en LaLiga en la victoria de los colchoneros ante el Real Club Celta de Vigo (2-0) en el Wanda Metropolitano. El serverí, que ya debutó de manera testimonial la temporada pasada en un choque frente al Deportivo, también partió de inicio ante el Sant Andreu en el duelo del presente curso en la Copa del Rey.
Las bajas en la zaga -Godín, Giménez y Savic- han provocado que Simeone se decantará por un balear que ha retrasado su posición para ocupar el eje de la defensa junto a Montero. El francés Griezmann y Morata han sido los autores de los goles del triunfo.
El mallorquín Toni Moya, esta tarde en el Wanda (Foto: ATM)
"Un poquito de presión"
"Sí que tienes un poquito de presión, pero al final esa presión se va en cuanto empieza el partido. El equipo te ayuda en todo, desde el primer momento te arropan, te ayudan a que sea más fácil y trabajando todos juntos es como se consiguen las victorias", ha asegurado Toni Moya al término del choque.
El de Son Servera ha reconocido que "a pesar de que no era mi posición, en la que suelo jugar (de centrocampista), me he sentido muy cómodo con los compañeros, me han ayudado desde el primer minuto y al final hemos podido conseguir la victoria".
"Simeone me ha transmitido tranquilidad, que ya había jugado en pretemporada en esa posición y que tuviera sobre todo tranquilidad y que aprovechase las oportunidades", ha apuntado antes de afirmar que "cuando hay alguna oportunidad está, transmite mucha seguridad y tenemos mucha suerte de tener al mejor portero del mundo", en alusión a Oblack.
Hasta cadetes estuvo en la Isla
Moya inició su carrera en el Serverense y en el CD Manacor antes de llegar al RCD Mallorca. Después de tres temporadas en la Ciutat Esportiva Antonio Asensio, aceptó la irrechazable oferta del Atlético de Madrid. Por entonces, tenía 15 años.
Campeón de Copa juvenil con el Atleti en Palma
El 26 de junio de 2016, Son Bibiloni acogió la final de la Copa del Rey de juveniles entre el Real Madrid y el Atlético de Madrid.
El balear fue decisivo en el desenlace puesto que un doblete suyo forzó la prórroga. Finalmente, un gol de Solano dio el título a los rojiblancos. Para los curiosos, comentar que los blancos estaban dirigidos por Solari y que en sus filas estaban Luca Zidane y el mundialista marroquí Achraf, ahora cedido en el Dortmund.
