Los escurridizos pirómanos de Palma no dan tregua. Los vándalos incendiarios han vuelto a actuar quemando otros dos contenedores que se suman a su extensa lista. En esta ocasión, han prendido fuego a dos depósitos ubicados en la calle Bisbe Maure. Los hechos tuvieron lugar alrededor de las 23:50 horas de ayer lunes. Hasta el lugar de los hechos se desplazaron los bomberos además de efectivos de la Policía Nacional y de la Policía Local.
Uno de los contenedores ha quedado totalmente calcinado y el otro se vio afectado por las llamas. Por fortuna, no ha habido que lamentar heridos ni daños en vehículos estacionados ni en fachadas cercanas.
Cuatro días después del último incendio
Este nuevo suceso ha ocurrido tan solo cuatro días después del último incendio, que tuvo lugar el viernes pasado cuando fue quemado de manera intencionada una batería de cuatro contenedores en la calle Eusebio Estada.
Horas antes, un vehículo estacionado en la calle Gremi Sucres del polígono Son Castelló fue incendiado, según parece, de manera intencionada.
Cada contenedor vale 700 euros del contribuyente
Desde diciembre de 2017 han ardido en Palma unos 360 contenedores. Una grosera cantidad que supone una gran pérdida económica porque cada recipiente cuesta 700 euros. A esto hay que sumar el coste de retirarlos tras el incendio, además de la posterior limpieza. Todo ello añaden a las pérdidas 300 euros adicionales para cada contenedor.
Así pues, teniendo en cuenta que el coste total asciende hasta los 1.000 euros por unidad, el montante económico ha sido de unos 360.000 euros.
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Dos pirómanos entre rejas
Dos hombres, de 48 y 51 años de edad, fueron detenidos por el incendio de cinco contenedores y tres vehículos en la calle Poeta Guillem Colom. Ambos ingresaron el pasado jueves 25 de abril en prisión sin fianza.
Francisco José M.M, el acusado que fue grabado por una cámara de control del tráfico de Cort mientras lanzaba un trapo ardiendo a los depósitos, se negó a declarar. El otro, José F.D., se desvinculó de los hechos.