viernes. 29.03.2024
El mallorquín Rudy Fernández (Foto: Twitter)
El mallorquín Rudy Fernández (Foto: Twitter)

El Real Madrid del mallorquín Rudy Fernández y del menorquín Sergio Llull se ha impuesto este sábado por 87-67 al Barça Lassa en el primer partido de la serie final de la Liga Endesa, con una gran actuación del base argentino Facundo Campazzo por sus 19 puntos y desesperando a un equipo rival que ha pagado caro su falta de tensión al inicio.

En la cita inaugural de las batallas por el título liguero, que enfrentan a merengues y culés por decimoquinta vez en la historia de la ACB, el comienzo fue efervescente por parte de los locales. Así, el WiZink Center ha vibrado con un 3+1 firmada por Anthony Randolph en el primer ataque.

El mallorquín Rudy Fernández (Foto: Twitter) El mallorquín Rudy Fernández (Foto: Twitter)

Los locales empiezan mandando 

Esa primera jugada del ala-pívot esloveno ha sido el augurio de un cuarto con sabor madridista, especialmente por la inspiración anotadora de su compañero Facu Campazzo. El exterior argentino ha anotado siete puntos del tirón para poner al Real Madrid con un 9-0 arriba en apenas tres minutos.

Les había costado arrancar, y bastante, a los pupilos de Svetislav Pesic, que fiaron su réplica al juego interior. Ahí ha aparecido el croata Ante Tomic, habitual diana de cada pitada procedente desde la grada del Palacio de los Deportes de la capital.

El expívot madridista ha mantenido a flote a su equipo mientras el resto de compañeros se desperezaba con el tiro de media y larga distancia. El apoyo coral ha surtido efecto, junto a la buena rotación que había hecho Pesic con su banquillo, y el Barça se ha acercado (17-15) al verse espoleado por Thomas Heurtel y Adam Hanga.

El efecto Llull contagia a Rudy

Sin embargo, la gran baza de Sergio Llull casi siempre está cuando Pablo Laso la necesita. El base de Maó ha tomado el relevo de Campazzo en todo, pues ha agarrado los mandos de juego y también el liderazgo anotador con pleno en sus dos intentos de triple durante el primer periodo (22-17).

Pero es que el efecto Llull ha ido más allá, pues ha contagiado a Rudy Fernández y éste ha anotado dos triples con los que el cuadro local superaba la decena de renta (30-19). Los planes de Laso se cumplían también en defensa, con un par de recuperaciones clave, y además se han unido a la fiesta de canastas algunos secundarios de lujo.

Cómoda ventaja de los blancos al descanso

Fabien Causeur, Jaycee Carroll, Trey Thompkins... Cada pieza del engranaje funcionaba en su sitio, lo que se ha reflejado con un marcador de 41-27 a dos minutos y medio del descanso. Rebajó entonces la sangría un triple lejano de Chris Singleton, aportando así sus primeros tantos al encuentro.

El ala-pívot yanqui se había echado al equipo a su espalda, pero ni por esas. Se ha encargado Campazzo de dejarlo claro, de nuevo, con su puntería desde más allá de los 6,75 metros; gracias a dos 'mandarinas' más propias del '23' blanco que del jugador argentino, el Real Madrid se ha marchado al intermedio con mucha comodidad (47-32).

Pelea psicológica en el tercer cuarto

El regreso de los vestuarios se ha transformado en una pelea psicológica, con protagonismo para el trío arbitral tras una dura falta del base francés Thomas Heurtel. La consulta del 'Instant Replay' no ha contentado a ninguno de los dos entrenadores, testigos de una retahíla de interrupciones que dejaban similares distancias a la conclusión del tercer periodo (63-52).

La unidad 'B' de Pesic, con Pierre Oriola por dentro para tapar los huecos de Tomic y con Kyle Kuric por fuera para insuflar energía, ha carburado a medias y la lucha del último cuarto presagiaba gesta o naufragio para los blaugranas. Y, pese a un triple inicial de Kuric, los blancos gestionaron su ventaja con pericia y a lomos de Jeff Taylor.

Fiesta merengue en el WiZink Center

El alero sueco, algo desacertado antes de los 10 minutos definitivos, de repente ha enlazado cinco puntos para responder a cualquier conato de remontada (71-54) y también para enjuagar la alegría del WiZink Center, a rebosar de aficionados que celebraban con ganas el triunfo ante el eterno rival en la Liga ACB.

El lunes, segundo duelo en el mismo escenario

El 87-67 de la conclusión, bien abrochado por el conjunto local tras dos lances de Causeur, dejó patente que el Barça precisa rápidamente de una mejor versión si quiere evitar que su adversario reedite el título liguero. El siguiente asalto de esta final será el próximo lunes (21:00 horas) y en el mismo escenario.

El Real Madrid de Rudy y Llull se lleva el primer punto de la final