El Juzgado Togado Militar 23 de Almería investiga a 16 militares, entre ellos a dos oficiales, un suboficial y distinto personal de tropa, tras la muerte en marzo del legionario mallorquín Alejandro Jiménez, de 22 años de edad, en un ejercicio con fuego real. A partir de septiembre se tiene previsto recibir nuevas declaraciones. El procedimiento se ha iniciado por un posible delito contra la eficacia del servicio con resultado de muerte del Código Penal Militar, aunque no se descarta la ampliación a otros delitos militares.
De momento, han explicado que no se ha acordado prisión preventiva para el presunto autor del disparo, sino la obligación de comparecer los días 1 y 15 de cada mes y se le ha retirado el pasaporte. Tampoco se han incoado expedientes disciplinarios ni otro tipo de procedimiento para depurar otras posibles responsabilidades.
Fusil de asalto
Tal como han explicado, el fallecimiento se produjo como consecuencia de un impacto de proyectil del calibre 556 milímetros disparado con un fusil de asalto HK G36 durante un ejercicio de tiro con fuego real en el Campo de tiro de Agost (Alicante).
El 18 de julio se levantó el secreto de las actuaciones. Así, a partir de septiembre se tiene previsto recibir nuevas declaraciones una vez que las partes han podido acceder a las diligencias practicadas hasta la fecha.
