jueves. 28.03.2024

En 1981 abrió sus ojos al mundo un mallorquín de Santanyí, Llorenç X. Vidal Lledó, en el seno de una familia tradicional de la isla balear. Con el transcurrir del tiempo, el niño Llorenç fue mostrando que su sensibilidad y destino estaba unido a la pintura como algo consustancial a su personalidad. Hacia sus dibujos como una necesidad expresiva... seguramente queriendo decir a quienes formaban parte de su vida (familia,, amigos, compañeros de clase y de juegos...) "este soy yo, así veo el Mundo, y así lo interpreto".

Camino de sus primeros cuarenta años, con esa mirada curiosa, reflexiva y con cierta ingenuidad, recuerda que "de pequeño dije en casa que lo de pintar era mi vocación, lo que quería hacer en mi Vida porque es con lo que yo era y soy feliz...".

El pintor Llorenç Garrit y su "Estudi Can Garrit" El pintor Llorenç Garrit y su "Estudi Can Garrit"

Autodidacta

Aún cuando estudio ilustración, guionista, hizo cursos de cómics... su impronta, ese sello que tienen los que son genuinos, le llevo a ser autodidacta o como dirían los ingleses: "Self made" ("Hecho a sí mismo").

Desde sus inicios le llamaron la atención las obras que realizaban amigos pintores de su familia. Y especialmente le cautivaban los cómics y tebeos. Y ese mundo de la fantasía, lo virtual e imaginativo lo condujo a su pintura, pero no de una manera abstracta, sino con un realismo en el que cuanto plasma sobre el lienzo adquiere realismo, vida...

El artista recuerda con una sonrisa que "de pequeño me reñían en la escuela porque me cogían dibujando en clase... y ahora me llaman desde las escuelas para que vaya a pintar".

Dos trabajos de Garrit, en los que se puede apreciar su estilo personal Dos trabajos de Garrit, en los que se puede apreciar su estilo personal

Nombre y estilo definido

Con el nombre artístico de Llorenç Garrit y su propio estudio, "C'an Garrit", ubicado en una encantadora casa típica mallorquina, su personalidad artística se fue definiendo de manera muy clara. Estaba claro que el haber recibido clases de técnica, o contemplado obras de distintos artistas, su creación llevaba unos derroteros muy identitarios, sin parangón.

El pincel le lleva por colores llamativos, con gran dominio de los tonos pastel. Su obra tiene fuerza, un estilo definido, con protagonismo de imágenes como una payesa sembrando, o el campesino en su quehacer diario, y esos paisajes montañosos de su querida tierra, los cuadros con un mar Mediterráneo acariciando las azules calas de Santanyí, o ese árbol que se dibuja ante el ocaso del sol... En suma, la naturaleza, la historia de nuestras raíces, plasmado con sencillez, pero con tan potente expresividad que sobran las palabras.

Una de las obras del artista mallorquín Una de las obras del artista mallorquín

Una prueba de dureza

En su estudio, donde se respira calma y se huele el arte, Llorenç nos recordaba un episodio muy especial de su vida, una prueba de dureza, en la que nos dijo que "yo he sido y soy afortunado porque tengo una familia y amigos maravillosos y porque hago lo que me gusta; pero quise experimentar lo que es el trabajo duro y me dedique a la jardinería y a las labores del campo; y hubo un antes y un después... me dio más consistencia como persona, me hizo crecer espiritualmente..".

Alguien que abandonó su "zona de confort"... que quiso internarse en la difícil y sacrificada labor agrícola... que apostó por el mismo para ser artista, pintor... y no ser más de lo mismo... con una pintura de un estilo tan personal... merece el reconocimiento y el aprecio de una trayectoria que ha entrado ya en ese momento de las exposiciones nacionales y en el extranjero, de los artículos en los medios de comunicación, de estar en el elenco de la pintura que se significa por tener su propio pedigrí.

Y como de bien nacido es ser agradecido, Llorenç Garrit quiso dar la gracias a todos los que han estado y están con él ("sobre todo en los momentos difíciles"), con una especial mención a Miquel Taconer, de las bodegas de Santanyí Son Alegre, que con su patrocinio significa un respaldo muy importante para el artista.

Llorenç Garrit: Personalísimo estilo pictórico